TEXAS, Estados Unidos.- Lo que parecía que iba a terminar en tragedia, se convirtió en un milagro. Audrina Cardenas nació con Ectopia cordis. Es decir, una buena parte de su corazón se encontraba en la superficie de su abdomen.
Los médicos descubrieron la condición de la bebé cuando todavía estaba en la panza de su madre, gracias a las ecografías que dejaron en evidencia el problema. Considerando lo delicado de la situación, le dieron la posibilidad a su madre de interrumpir el embarazo, según precisaron en el sitio inglés Cron.com
Ashley Cardenas, de 25 años, decidió seguir adelante, dado que había algunas señales que permitían mantener el optimismo. "Su corazón está estructuralmente en buen estado, y ella sobrevivió a las primeras 48 y 72 horas después del nacimiento", dijo Charles Fraser, cirujano del hospital Pediátrico de Texas, donde ocurrió el milagro.
Fraser y un equipo de cirujanos cardiovasculares, pediatras y plásticos operaron durante seis horas a corazón abierto, el día después del nacimiento de la niña. Los médicos configuraron una cavidad en el pecho, poniendo el corazón y luego estirando la piel, según publicó el medio Telecinco.es.
Aunque tuvieron este primer gan éxito, la beba todavía no se encuentra fuera de peligro. El corazón no está protegido por la coraza y el tejido circundante está expuesto al mundo exterior, y por tanto, es muy vulnerable a las infecciones. Es por ello que los médicos tendrán que diseñar una coraza alrededor del corazón de Audrina, en una nueva operación, para evitar futuras infecciones.
Aunque la beba necesite más cirugías para corregir otros defectos cardíacos, sus médicos esperarán por lo menos un par de años para darle tiempo a la pequeña a sanar y desarrollarse. "Me siento bendecida solo por el hecho de saber que está acá y se esta poniendo mejor cada día. Ella es mi pequeña bebé milagro" resumió su madre. LA GACETA ©